El arte bello por excelencia la música, es en nuestros malhadados tiempos, importantísimo, sumamente útil y altamente educativo y moralizador. Mediante él se forma el gusto por lo bello y selecto; se moralizan las costumbres, rodas y embrutecidas por el materialismo, el odio y rencor entre los hombres; se recrea el espíritu en el nobilísimo encanto de las armonías musicales; se estrechan y amenizan las relaciones sociales y los vínculos familiares mediante selectas ejecuciones en los días memorables de nuestra vida.
Como apuntaba bien aquel cristiano e insigne hombre de las letras españolas, Menéndez y Pelayo, de todas las artes, la música es la que nos separa de la materia y de la voluntad de vivir, ella nos ofrece el alma de las cosas; es la vida misma.
Al principio del curso escolar, los Hermanos encargados del Canto y de la Música habían prometido al numeroso y selecto grupo que integraba la Coral del Colegio, un paseo a la finca ¨IMIAS¨ como justa compensación a la buena voluntad y brillante actuación llevada a cabo en las distintas fiestas de familia que tomara parte en su querido plantel.