PLEGARIA A MARIA, MADRE NUESTRA, colaboracion del H. Rafael G. Martin
VIRGEN SANTA,
VIRGEN PURA,
VIDA, ESPERANZA
Y DULZURA,
DEL ALMA QUE EN TI CONFÍA,
MADRE DE DIOS, MADRE MÍA.
MIENTRAS MI VIDA ALENTARE,
TODO MI AMOR PARA TI;
MAS SI MI AMOR TE OLVIDARE,
¡MADRE MÍA! ¡MADRE MÍA!
AUNQUE MI AMOR TE OLVIDARE,
¡TÚ NO TE OLVIDES DE MÍ!
No basta saber que Ella es Madre, considerarla de este modo, hablar así de Ella.
Hemos de confiar en Ella como un hijo siempre confía en su madre; quererla, honrarla.
Hoy recemos con fervor la SALVE, oración en la cual llamamos a María,
REINA y MADRE DE MISERICORDIA
Hoy, DÍA DE LAS MADRES, recordemos a nuestras madres, vivas o difuntas, y hagamos nuestros los sentimientos expresados en la canción MADRECITA DEL ALMA QUERIDA, de Osvaldo Farrés.
´ Madrecita del alma querida,
en mi pecho yo llevo una flor,
no te importe el color que ella tenga
porque al fin tú eres, madre, una flor.
Tu cariño es mi bien, madrecita;
en mi vida tú has sido y serás
el refugio de todas mis penas
y la dicha de amor y verdad.
Aunque amores yo tenga en la vida,
que me llenen de felicidad,
como el tuyo, jamás madrecita.
como el tuyo no habré de encontrar.